El poder de crear sin exigencias y sin expectativas

Hay momentos en los que sentimos que todo se acumula: las tareas, las decisiones, los pendientes…Y nuestra mente empieza a correr tan rápido que ya no sabemos cómo parar.

El cuerpo se vuelve tenso, los pensamientos se vuelven pesados, y la alegría… se esconde.

¿Te ha pasado?

Entonces llega esa necesidad urgente de respirar más profundo,de encontrar un espacio donde puedas volver a ti misma. Un refugio, no fuera, sino dentro de tí… y es ahí donde aparece la creatividad como una medicina poderosa.

No la creatividad que busca likes, resultados, logros o aplausos. Sino la creatividad que nace del alma. Esa que no necesita permiso sino que simplemente quiere sentir.🎨

Crear sin exigencias es un acto de sanación. Cuando tomas un lápiz, un pincel, una hoja, unas acuarelas…y simplemente dejas que tu mano se mueva,algo profundo empieza a suceder. Dejas de pensar tanto y comienzas a sentir. La mente baja el volumen, el corazón se abre, tu respiración se vuelve más lenta y tu energía se acomoda.

Dibujar por dibujar, garabatear, pintar sin forma, sin meta…es una manera directa de liberar emociones,de volver al presente,de reconectar con ese espacio dentro de ti donde todo está bien.

Es volver a lo esencial: el juego, la curiosidad, el placer simple de crear sin ningún deber.

Crear sin juicio es recordar tu poder interior. Vivimos en una cultura que nos ha hecho creer que solo vale lo que “sirve”, lo que “vende”, lo que es perfecto.

Pero tú no viniste a ser perfecta.Viniste a ser tú misma con todo tu color, tu intuición, tu sentir, tu luz (y tus sombras también).

Por eso, cada vez que eliges crear sin presión, estás rompiendo un patrón, y le estás diciendo “sí” a tu libertad.

Esto es tomar las riendas de tu energía y devolverte el permiso de disfrutar.

Porque sí, amiga mía: Mereces disfrutar. Mereces sentirte bien sin tener que demostrar nada a nadie. Mereces espacios donde puedas simplemente ser, y la creatividad, cuando se vive desde el corazón, se convierte en tu aliada para sanar, para soltar, para reconectar con la alegría más auténtica:esa que nace de ti, sin condiciones.

Y ahora, seguramente te estás preguntando ¿Cómo empezar? Así que te voy a compartir un ritual creativo super fácil:

• Prepara tu espacio:Elige un rincón tranquilo.
• Pon una música suave o disfruta del silencio.
• Prende una vela si lo deseas.
• Respira profundo tres veces.Con cada exhalación, imagina que sueltas el estrés, las exigencias, las prisas.
• Toma tus materiales sin pensar demasiado, pueden ser lápices, crayones, acuarelas, bolígrafos… Lo que tengas a mano.
• Pon una intención suave:“Hoy dibujo para sentirme. Hoy me regalo este momento solo para mí.”
• Comienza a crear sin buscar nada y deja que la mano fluya. Rayas, manchas, líneas, formas libres. Si sientes emociones, déjalas salir. Si te aburres, sigue. Si algo te gusta, disfrútalo.
• Cuando termines, míralo con amor.
• Agradece ese momento. No juzgues. Respira.
• Pregúntate: ¿Qué parte de mí se expresó hoy? ¿Cómo me siento ahora?
• Guárda tu dibujo como un recordatorio de tu poder interior.
• Para ti, que estás leyendo esto…Si tu mente está cansada, si tu corazón siente peso, si la vida te ha estado exigiendo demasiado…detente y regálate un espacio de creación libre, sin metas, sin juicios. Hazlo por tí, porque cuando tú te das permiso de volver a tu centro, todo alrededor comienza a alinearse. Tú estás volviendo a ti.Y ese retorno es el viaje más valiente, amoroso y transformador que puedes emprender.

Con amor y luz,

Sandra Navarrete