Amor a la Distancia: Encontrando Fuerza en la Ausencia

A veces, me encuentro rodeada de personas, de paisajes hermosos y momentos llenos de energía, pero en lo profundo de mi ser, una soledad parece llenar mi corazón. Es curioso cómo, a pesar de tener todo a mi alrededor, puedo sentir ese vacío cuando no estás a mi lado. Es una distancia que duele, pero también es una oportunidad para redescubrirme y fortalecerme.
El amor a la distancia no es fácil. Siento tu ausencia como una sombra que me acompaña, pero también me enseña a valorar cada momento, cada recuerdo, cada pequeño gesto que me conecta contigo, incluso en tu ausencia. El hecho de no tenerte cerca no disminuye el amor que siento por ti, al contrario, lo hace crecer, porque al extrañarte, reconozco el poder de lo que compartimos.
Es importante entender que el amor no siempre necesita estar presente físicamente para ser real. A veces, el amor se encuentra en el recuerdo, en los pensamientos compartidos, en los sueños a futuro. Y mientras más grande es la distancia, más profunda es la conexión que podemos construir, porque al aprender a extrañar, aprendemos a valorar profundamente.
Lo que siento por ti no se mide por la proximidad, sino por el vínculo que hemos creado. No importa cuántos kilómetros nos separen, ni cuántos días pasen sin vernos. Lo que importa es el amor que tenemos, esa fuerza inquebrantable que resiste la distancia y crece a través de ella.
Y aunque me duele no tenerte a mi lado ahora, sé que este amor me hace más fuerte. Me hace comprender que soy capaz de sostenerme a mí misma, de nutrir mi propio ser y de no depender de la presencia de otro para ser feliz. Porque el amor, al final, empieza en uno mismo. Y tú, amor mío, solo eres el reflejo de esa fuerza interna que hoy me impulsa a seguir adelante con más confianza, más amor y más determinación.
Así que, aunque la distancia me toque el alma, también me recuerda el poder que tengo dentro de mí. El amor no es solo un sentimiento, es una elección diaria, un compromiso que se lleva dentro, sin importar el espacio que nos separa. Y mientras tanto, me empodero en cada recuerdo, en cada suspiro que te envía mi corazón. Sé que lo que compartimos es eterno, y que pronto, el tiempo y la distancia serán solo una parte más de nuestra historia.