El tunel en la mente

Encuentra la Luz en tu Interior

A veces, nos encontramos en un túnel oscuro, donde la desesperación y la soledad parecen no tener fin.

El ruido de nuestros pensamientos nos ahoga, y parece que no hay salida. En esos momentos, todo lo que anhelamos es ver la luz, sentir que hay esperanza, que todo lo que vivimos tiene un propósito.

Recuerdo un día en el que sentí la tristeza más profunda. Sentí como si todo lo que conocía me estuviera aplastando, como si estuviera atrapada en un remolino sin escape. Tomé mi bicicleta y huí, buscando algún respiro, buscando algo que me sacara de ese lugar oscuro. Pero la verdad es que, no importa cuántos kilómetros recorras, la solución siempre está dentro de ti.

Decidí lanzarme en la laguna, como una forma de escapar, de liberarme. El frío helado me rodeó, pero fue en ese momento cuando mis sentidos empezaron a reaccionar. Fue entonces cuando entendí que, a veces, las situaciones más duras son las que nos despiertan y nos permiten conectar nuevamente con la vida.

En la arena, entre lágrimas, me sentí vulnerable, y traté  también de encontrar un rincón de paz, Llamando a alguien cercano, buscando ayuda, buscando apoyo y encontré puertas cerradas.

Me sentía agotada, sin embargo, ese gesto de pedir ayuda me recordó algo fundamental: la verdadera fuerza viene de Dios, y esa fuerza reside dentro de cada uno de nosotros.

Nos olvidamos de algo esencial: nuestra felicidad no está en las circunstancias ni en los demás, está dentro de nosotros. La luz que buscamos está en nuestro interior, esperando a ser descubierta. Cuando tocamos fondo, es cuando aprendemos a mirar dentro de nosotros mismos, y es allí donde encontramos la verdadera paz.

No importa cuán oscuro sea el túnel en el que te encuentres, siempre habrá una salida. Recuerda que eres más fuerte de lo que crees, que tienes todo lo que necesitas para superar cualquier dificultad. La luz está dentro de ti, y tu felicidad es tuya para crearla.

Confía en ti mismo, confía en el proceso. Siempre habrá momentos difíciles, pero esos momentos son los que nos permiten crecer, nos enseñan a valorar la paz interior. La fuerza viene de Dios, y tú eres capaz de encontrar esa luz, solo debes creer en ti y en tu capacidad para superar lo que sea que la vida te ponga enfrente.

Tu propia felicidad está en ti. Encuentra la luz que brilla dentro de tu corazón y verás cómo todo a tu alrededor comienza a transformarse.

 

 

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